En concreto es una patología que nos hace apretar y rechinar los dientes generalmente cuando estamos dormidos, aunque también hay casos de bruxismo diurno. Esta condición puede afectarnos de diferentes maneras: provocando dolor de cabeza al despertar, dolor de oídos, dolores musculares, desgaste de piezas dentales. Una fórmula muy sencilla de tratarla es a través de una férula de descarga.
¿Qué hacer para evitar el bruxismo?
- Aplicar hielo o calor húmedo en la mandíbula para calmar el dolor.
- Evitar comer alimentos muy duros para no forzar la mandíbula.
- No masticar chicle.
- Tomar mucha agua.
- Realizar estiramientos de los músculos de la boca.
- Mantener una dieta rica en calcio que ayude a proteger el esmalte.